Varios detenidos en Granada por robar sellos y talonarios en centros médicos granadinos para obtener medicamentos para el dopaje deportivo
La Guardia Civil ha descubierto que eran delincuentes habituales los que acudían a las farmacias con las recetas falsificadas, y que luego entregaban los medicamentos obtenidos al líder de la organización | Un total de 51 personas han pasado a disposición judicial
El Equipo de Delitos Contra la Administración (EDA) de la Guardia Civil de Granada, en colaboración con la Delegación Territorial de la Consejería de Salud en Granada, en una operación coordinada y dirigida por el Juzgado de Instrucción nº 1 de los de Granada, ha desarticulado una organización criminal que obtenía medicamentos que se usan para doparse en el ámbito deportivo, utilizando talonarios y sellos sustraídos en centros médicos granadinos.
En esta operación han sido detenidas 10 personas por su pertenencia a una organización criminal, cuatro de los cuales son menores de edad; y otras 41 personas han sido investigadas: farmacéuticos titulares, adjuntos y técnicos de las farmacias en las que se abastecían los integrantes de la organización.
En la fase de explotación de la operación se han realizado dos registros en los domicilios del cabecilla de la organización, donde la Guardia Civil ha intervenido 1.336 dosis de diferentes medicamentos como Testex prolongatum, Provirón, Winstrol, Femara, Decadurabolin, Arimidex, Gonal y Trakimazin.
La Guardia Civil comenzó esta investigación en el mes de junio de 2016 al detectar en la provincia de Granada la adquisición fraudulenta de medicamentos utilizados como sustancias anabolizantes en el dopaje deportivo, concretamente entre practicantes de fitness y culturismo.
Esta organización criminal ha conseguido medicamentos de manera ilegal entre los años 2015 y 2017 en farmacias de las provincias de Granada, Jaén, Málaga y Almería.
Para conseguir estos medicamentos han utilizado talonarios de recetas que fueron sustraídos en un centro médico de la provincia de Granada y un sello falso. Los investigadores han descubierto que el cabecilla de la organización pagaba 400 euros por cada talonario robado.
La Guardia Civil ha descubierto que eran delincuentes habituales los que acudían a las farmacias con las recetas falsificadas, y que estos luego entregaban los medicamentos obtenidos al líder de la organización. Este posteriormente utilizaba al resto de los integrantes de la organización para distribuir los medicamentos en gimnasios de Granada.
La Guardia Civil también ha descubierto que en algunas de estas farmacias han dispensado medicamentos que estando sujetos a un control más riguroso que la simple receta, control que no llevaron a cabo. Como por ejemplo medicamentos específicos para mujeres menopáusicas recetados a un hombre; recetas en las que la posología era muy superior a la preceptiva, y una supuesta falta de control en otros elementos esenciales de estas recetas.
La Guardia Civil estima que los detenidos han utilizado unas 400 recetas de manera fraudulenta. El precio en farmacia de los productos prescritos es de unos 5.800 euros, que en el mercado negro lógicamente sería muy superior.