Vecinos del Albaicín censuran que las administraciones "no sean capaces de consensuar un modelo de barrio"
Los vecinos del bajo Albaicín afirman que la propuesta redactada por el Ayuntamiento de Granada para la revisión del Plan Especial de Protección del barrio "no mejoraba en nada" el documento que ahora está vigente, por lo que dicen no estar molestos con su archivo, si bien han censurado que las administraciones "no sean capaces de consensuar" este asunto.
Estas declaraciones se producen después de que el Ayuntamiento haya anunciado el archivo de la revisión del Plan Albaicín alegando "falta de colaboración" por parte de la Junta, a la que reprocha que no haya emitido una resolución sobre la propuesta municipal que le fue remitida en 2009.
El Gobierno andaluz ha negado este extremo, asegurando que sí "se han emitido informes a dichas consultas, relatando las cuestiones pendientes de subsanación", por lo que ha instado a la entidad local a retomar el proyecto.
La presidenta de la Asociación de Vecinos del Bajo Albaicín, Lola Boloix, ha señalado que los vecinos no estaban de acuerdo en cómo se estaba planteando el documento, pues "no se ha revisado la planimetría del barrio" ni se ha hecho un "buen trabajo de campo" para actualizar el plan, de modo que "era un fracaso desde un inicio".
De hecho, ha acusado a la concejal de Urbanismo, Isabel Nieto (PP), de no tener "la sensibilidad necesaria" para abordar este asunto, ya que a su juicio no "entiende el barrio" como un entorno patrimonial a proteger sino "como una urbanización".
"Tenemos las murallas destrozadas, monumentos cerrados, casas moriscas abandonadas en las que el Ayuntamiento debería intervenir", ha clamado Boloix. Por ello, ha hecho hincapié en la necesidad de arreglar el casco histórico "mediante rehabilitaciones y no con obra nueva", como a su entender está favoreciendo la entidad local con transformaciones urbanísticas que a su juicio "están fuera de lugar".
Los vecinos han señalado que éste es el segundo plan que se archiva en los últimos años, lo que supone "tiempo y dinero perdido". "Si unos hacen una chapuza, los otros tienen la obligación de sentarse con ellos para arreglarlo", ha advertido la presidenta de la Asociación de Vecinos del Bajo Albaicín.