Las voces de los venezolanos exiliados en Granada resuenan: "Queremos una Venezuela libre"

Granada es para muchos una ciudad llena de oportunidades, ya no solo por su esencia cultural, sino también por ser un lugar donde el sentido de comunidad aporta gran valor a la calidad de vida de sus habitantes. Una de las nacionalidades con mayor presencia en la provincia es la comunidad venezolana, una población que ha aumentado en los últimos años. Según los últimos datos del INE, los venezolanos residentes en la provincia de Granada se fijan entorno a 2.419 personas.

@granadadigital 🇻🇪 | Los venezolanos residentes en Granada estallan ante las polémicas elecciones de su país y se manifiestan en contra del gobierno de Maduro 🗣️: “Tenemos el ánimo, la fe y la determinación, de que nuestro presidente electo es Edmundo Urrutia” Conoce el testimonio de Plácido y Javier en GranadaDigital.es 📲 #Informacion #Noticias #Actualidad #Granada #Venezuela #Residentes #Viral #Parati #Elecciones #Maduro #Urrutia #Machado #fyp #Exiliados #Caracas ♬ Corporate News Commercial - KarmaMusicUa

 

Venezuela vive una situación crítica tanto en lo político, como económico y social. Actualmente el país latinoamericano se encuentra en un periodo convulso tras las elecciones generales del pasado 28 de julio, en las que Nicolás Maduro se habría proclamado vencedor en unas elecciones tachadas de "fraude y falta de transparencia". 

La oposición, liderada por María Corina Machado, ha rechazado los resultados emitidos por el Consejo Nacional Electoral (CNE) de Venezuela, acusándolos de estar "controlados por el chavismo" y ha asegurado que cuenta "con un 73% de las actas de votación transmitidas por el CNE" que certifican el triunfo de Edmundo Urrutia con "el 70% de los votos y Maduro tiene el 30% de los votos restantes". 

A pesar de la lejanía que hay entre España y Venezuela, los residentes venezolanos en Granada observan con preocupación y esperanza uno de los eventos más importantes que podría cambiar el transcurso de la vida en su país natal. Las voces de los exiliados en la capital granadina resuenan con opiniones divididas, reflejando el dolor desde la distancia como el anhelo de un cambio que podría levantar de nuevo a Venezuela.  

Plácido Córcega es un venezonalo que reside en Granada desde hace cinco años. Junto a su familia decidió emigrar de su país ante la situación social que estaban viviendo. Su activismo y su lucha por una vida digna en Venezuela hizo que su vida corriera peligro, por lo que decidieron salir de allí antes de que fuera demasiado tarde. 

"Tenemos el ánimo, la fe y la determinación, de que nuestro presidente electo es Edmundo Urrutia"

Desde la distancia observa con detenimiento lo que está ocurriendo en su país natal y afirma que tienen "el ánimo, la fe y la determinación como pueblo venezolano desterrados en el exterior". "Estamos completamente determinados y convencidos de que nuestro presidente electo es Edmundo Urrutia, porque así lo ha confirmado ese 81% de las actas escrutadas", asegura Plácido.

En estos momentos existen varios escenarios posibles ante el reconocimiento internacional de los resultados de estas elecciones venezolanas. Por un lado, el presidente de Brasil, Lula Da Silva y el presidente de Colombia, Gustavo Petro, han pedido que se vuelvan a celebrar las elecciones en diciembre ante la falta de transparencia. "El pueblo venezolano no va a aceptar eso, porque ya se han celebrado y los resultados están ahí", reconoce Plácido.

Otro de los escenarios que apunta este venezolano sería el de que países como Estados Unidos o la Unión Europea reconozcan los resultados obtenidos y obliguen al CNE a publicar las actas. "El Washington Post publicó un estudio donde demostró que el presidente electo es Edmundo", añade Plácido Córcega. "Mientras seguiremos determinados, levantando nuestras voces hasta que los países admitan y reconozcan que nuestro presidente electo en Venezuela es Edmundo Urrutia", continúa.

A pesar de la polarización política, Venezuela sigue atravesando una grave crisis económica, caracterizada por la hiperinflación, el colapso de su industria petrolera y una economía en bancarrota. Un país donde escasean los productos básicos, donde los niveles de desempleo están por las nubes y la pobreza ha destruido el poder adquisitivo de las familias venezolanas.

En lo social imperan las protestas y las represiones, la violación de derechos humanos y la delicada situación de la sanidad ponen en alerta a la población cada día. "Recuerdo uno de los momentos más difíciles que viví en Venezuela, fue la hambruna de 2017, en ese momento desaparecieron los productos de la cesta básica de todos los estantes de los supermercados", destaca Plácido y añade que "no hay un sistema de salud pública que realmente pueda salvar a personas con enfermedades curables porque a veces no hay ni medicamentos".

"Venezuela ha tenido un retroceso en el desarrollo, antes de que Chávez entrara al gobierno existían 12.500 empresas industriales, hasta hace un año atrás quedaban solamente unas 2.500 empresas, la mayoría fueron expropiadas, asfixiadas e intervenidas, por lo que el país perdió gran parte de su capacidad de producción nacional", afirma este venezolano.

"Tenemos que regresar, remangarnos las mangas y ponernos a reconstruir el país que en 25 años fue completamente destruido"

El sentimiento de anhelo hacia su patria hace que, como Plácido, otros venezolanos exiliados en Granada sueñen con volver a casa para reconstruir la Venezuela que añoran. "Tenemos que regresar, remangarnos las mangas de las camisas y ponernos a trabajar para poder reconstruir el país que en 25 años fue completamente destruido", reconoce Córcega.

En la misma situación se encuentra Javier Rivas, uno de los 250 asistentes a la protesta venezolana del pasado sábado 3 de agosto frente a la Fuente de las Batallas de Granada. "Queremos que la comunidad internacional tome cartas en el asunto, no es algo que precise de mucha investigación para darse cuenta de lo que está pasando, las cosas están allí a la vista para quien quiera verlas", destaca Javier.

"Lo primero que queremos es que cese la violencia, las muertes de personas inocentes, las encarcelaciones injustas, queremos una estabilidad y una paz en la sociedad venezolana", reitera Rivas. "Hay algo que me gusta siempre destacar de nosotros, los venezolanos, es la buena actitud con la que enfrentamos las cosas, salimos a manifestaciones con el deseo de poder ser escuchados, pero también demostrar que somos optimistas, que a pesar de los desafíos y los obstáculos, seguimos con fe, con el deseo de ver un cambio, de tener la Venezuela bonita que todos deseamos, y que ese cambio no lo vamos a lograr únicamente con el esfuerzo de todos los venezolanos, sino que necesitamos también que la comunidad internacional tome cartas en el asunto", reconoce este joven.

"Queremos ser libres, una Venezuela libre, si hoy quisiéramos volver a nuestro país, algo que sería imposible, corremos peligro simplemente por mostrarnos a través de nuestras redes sociales que estamos en contra de la dictadura de Maduro", afirma Javier Rivas.

Los más de 7.000 kilómetros que separan Venezuela de Granada quedan reducidos al dolor, la esperanza y el anhelo de una patria que desde el exilio fijan su mirada con el corazón dividido por sus hermanos venezolanos. La incertidumbre contempla un pequeño resquicio para el cambio, motivado desde la fuerza y la resiliencia de los millones de venezolanos que salieron a las urnas el pasado 28 de julio. En estos momentos, la voz de los venezolanos resuena en todo el mundo, con el corazón en un puño gritan a los cuatro vientos "libertad, justicia y paz".